UN DÍA EN SERRARICA

A partir de las 7 de la mañana, encontraréis las puertas abiertas a un espacio de calma. Podréis empezar el día con una sesión de meditación que os permitirá conectaros con el ahora y aquí. A continuación, las zonas de trabajo estarán listas para que podáis desarrollar las sesiones que tengáis previstas. Eso sí, a media mañana os ofreceremos un desayuno saludable para hacer una pausa y reponer fuerzas para continuar.

Un poco antes de la comida, quienes quieran podrán disfrutar del spa exterior, con jacuzzi, sauna y ofuro (spa japonés). A continuación, el almuerzo será el momento de conversación, de distensión, de risas y de comer saludable.

Y durante toda la tarde volveréis a tener a vuestra disposición los espacios de trabajo: dos salas que disponen de todas las comodidades necesarias, de las cuales nos gusta destacar la luz natural. Una de las salas está pensada para ser un oasis de calma para poder crear. Es la sala creativa. En ella la piedra tiene mucha presencia, y un arco imponente da personalidad a un espacio nacido para acoger y transformar. Y a la sobriedad del material constructivo hemos puesto color, mucho color, porque los colores aportan alegría, apertura, ilusión…

La otra sala es la de trabajo propiamente dicho, donde encontraréis todo lo que podáis necesitar y también luz natural, que ayuda a mejorar la concentración y el rendimiento cognitivo y aumenta la capacidad visual y la productividad de las personas.